A VUELTAS CON EL GOBIERNO Y LOS IMPUESTOS PARA PYMES Y AUTONOMOS.

No habrá rebajas de impuestos para afrontar la crisis del coronavirus. El Gobierno de Pedro Sánchez tan sólo ha cedido a las súplicas de pymes y autónomos en ampliar al 20 de mayo la presentación de las declaraciones y las autoliquidaciones que iban a tener lugar en abril. Y lo ha hecho, in extremis, a un día de que terminara el plazo para domiciliar el pago de los impuestos, que se cumplía este miércoles 15.

Fue en el Consejo de Ministros de ayer, cuando se aprobó el Real Decreto-ley para el aplazamiento. Ni pymes, ni autónomos tendrán que presentar los pagos tributarios del cuarto mes del año, siempre que tengan facturaciones de menos de 600.000 euros, lo que deja fuera a la mediana empresa. En concreto, se podrá aplazar la presentación de la declaración trimestral del IVA, el pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades y el del IRPF. Algunos detalles de la medida:

  • En el caso de declaraciones domiciliadas, el plazo se amplía también un mes y pasa del 15 de abril al 15 de mayo.
  • Con independencia del momento de la presentación, todos los cargos se realizarán el 20 de mayo.
  • Eso incluye también las declaraciones presentadas antes del 15 de este mes.

  • Sólo un mes de margen y hay que pagar.

Tal y como señala la referencia del Consejo de Ministros, «esta medida pretende dar un mayor margen a los gestores y asesores fiscales para recopilar la información necesaria para cumplir con las obligaciones fiscales de sus clientes en un momento de gran dificultad por los efectos de la emergencia sanitaria». Como es público y notorio, los teléfonos de los asesores llevan semanas «saturados» ante la avalancha de empresas que están teniendo dificultades para llevar a cabo el pago de impuestos, tanto por la falta de ingresos como por el confinamiento, que les impide reunir la documentación necesaria o acudir a la oficina de la *Agencia Tributaria en persona y/o a la de su gestor.

*Agencia tributaria cerrada al público desde hace varias semanas.

«Hacienda está demostrando muy poca sensibilidad. Muchas empresas están desesperadas porque no están ingresando nada, y no tienen liquidez, pero también porque no saben realizar el pago de impuestos por la web. Es un despropósito, tal como hemos denunciado en múltiples ocasiones todas las asociaciones y colegios de asesores.

Desde nuestros despachos no dábamos crédito a que el departamento que dirige María Jesús Montero todavía no hubiera aplazado los pagos de impuestos en España. Al final lo ha hecho, sí, pero sólo un día antes de que se terminara el plazo para realizar el pago domiciliado. Si Hacienda hubiera decidido finalmente no llevar a cabo la medida, hubiera obligado a todos los contribuyentes a acudir en persona al banco para abonar sus obligaciones tributarias.

Aun siendo meritoria -máxime si tenemos en cuenta la difícil situación que están atravesando nuestras cuentas públicas- es una simple moratoria de un mes y no una condonación«, Hay que pagar y en base al trimestre, en varios supuestos no se ha tenido en cuenta el cierre de almenos 15 días.

  • No es para pymes, es para micropymes

Tampoco ha convencido del todo la medida. «El anuncio ha sido muy bien recibido», pero consideran «quesu aplicación para empresas y autónomos que facturen hasta 600.000 euros al año resulta restrictiva, si tenemos en cuenta que el volumen de negocio requerido a nuestras empresas para que puedan beneficiarse de esta moratoria supone solo un tercio de lo que en Europa se entiende por una microempresa».

Según la Comisión de la Unión Europea, se entiende por microempresa, a aquella que emplee a menos de 10 personas y cuyo volumen de negocio anual no supere los 2 millones de euros. Así, el nuevo anuncio de Sánchez y Montero iría dirigido técnicamente a la microempresa, o a una pequeña parte de ella.

  • Reglas de juego para esta ampliación vs aplazamientos RDL 7/2020

Como es posible dejar pendientes ciertos temas como… «habrá que ver como se conjuga esa ampliación del plazo con el aplazamiento de las deudas resultantes de estas autoliquidaciones y de las ya presentadas de acuerdo con lo regulado en el Real Decreto-ley 7/2020, del pasado 13 de marzo», señalaron en un comunicado, tras la rueda de prensa de Montero…

Tanta cabeza pensante… pero debe ser que el Sábado no daba para más…

  • Y más cosas pendientes

«Es lamentable que se hayan dejado para la semana que viene otras medidas no aprobadas en el Consejo de Ministros y anunciadas por la ministra, como, por ejemplo, las relativas a empresarios en módulos y al cálculo del pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades». Montero «ya había anunciado la posibilidad de que los autónomos que tributan por módulos puedan renunciar temporalmente a este sistema y realizar temporalmente el pago fraccionado por estimación directa».

«Igualmente, esperamos que no caiga en el olvido y se apruebe en un próximo Consejo de Ministros la posibilidad de que las sociedades que calculan su pago fraccionado en función de la cuota de la última declaración presentada, pudieran modificar dicha opción ahora y calcularlo en función de la base imponible del primer trimestre, lo cual significa que se adaptará mucho mejor el ingreso a cuenta a la tributación final».

Cuestiones, ellas, que estaban en el tintero y que no pueden entenderse por separado.

  • Y los autónomos, contentos.

Por mucho que «el Gobierno muestre su compromiso con pymes y autónomos, que conforman el grueso del tejido productivo de España», según señalan los socialistas, eliminar las cotizaciones de los empleados por ERTE y las de los autónomos (únicamente si cierran o facturan menos del 75%), son las dos ínfimas medidas que han aprobado en este sentido.

Es por eso quizá que los autónomos tampoco han quedado nada contentos con lo aprobado en el Consejo de Ministros. La Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) señala que este aplazamiento «llega tarde» y, además, que debería extenderse a julio, no a mayo. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, fue más allá, y denunció que «el Gobierno deja en la cuneta a 1,5 millones de autónomos que quedan fuera de cese de actividad sin tener trabajo y pagarán cuota en abril».